editorial

Saltar de la sartén, caer al fuego

Tal como explica el ex dirigente del sindicato de Aratirí, Francisco Da Silva -Observador 23/1- 95 ex obreros de la minera le iniciarán juicio por incumplir el pago de indemnización, hubo un acuerdo refrendando por el Min.Trabajo y Aratirí pagaría en cuotas, pero a la mitad la empresa dejó de pagar. Entre puestos de trabajado directos e indirectos por el proyecto minero eran unos 500 trabajadores en Cerro Chato y Valentines, eso murió hace 5 años y no queda nada. Lo interesante es que ahora diga que “es responsabilidad del gobierno que vengan empresas inescrupulosas como Aratiri”.

Pero lo primero es lo primero. Nuestra más completa solidaridad con los trabajadores de Aratirí estafados por empresa en forma descarada, una y otra vez, mientras al gobierno le importa más “no complicar la ecuación” de posibles inversores.

Esta solidaridad es incondicional, en el sentido de que no depende de que estemos de acuerdo o no con las opiniones del sindicato de Aratirí, o la UNTMRA, o el PIT-CNT. Pero la solidaridad no nos impide dar la nuestra.